Muchos terminan sus estudios secundarios y no tienen muy claro que es lo que se van a dedicar a hacer, yo  en esas épocas tampoco  lo había definido y había bastante incertidumbre sobre lo que iba a ser de mis destino, no había muchas opciones, la verdad no en gustaba ni realizar operaciones matemáticas ni memorizar grandes volúmenes de texto que es lo que  se requería para muchas de las  carreras que mis compañeros estaban optando.

Yo cuando termine quería hacerme de una carrera que me permitiese trabara de manera inmediata luego de acabarla porque realmente no  tenía los recursos para seguir sustentando estudios después de titularme así que opte por aprender a cocinar en fp cocina, creo que esta fue una de las decisiones más importantes y trascendentales que tome en mi vida, era justo lo que deseaba estudiar algo que no requiera demasiados estudios teóricos y no necesite realizar demasiadas  operaciones matemáticas,  ya demás de ello con una fuerte base empírica que es lo que se requiere en esta clase de áreas.

Terminar los cursos que me impartieron en  este instituto  no voy a negar que tuve que seguir aprendiendo por mi cuenta nuevas recetas y nuevas técnicas de cocina pero las bases que logre entender mientras me encontraba estudiando fueron  determinantes para que pueda seguir aprendiéndolas cosas nuevas que aun ahora sigo perfeccionando, en general el medio suele ser bastante pesimista y no pretenden hablar de que una carrera de este tipo es la adecuada para estudiar, es un prejuicio común  pero no es para nada verdadero, en la cocina como en todo trabajo hay que esforzarse, probar cosas nuevas y trabajar hasta cansarse,  los que si están equivocados son aquellos que creen que al entrar a este negocio van a trabajar menos que los profesionales universitarios, la verdad es que se trabaja mucho y tiene que gustarte, porque al final de cuentas luego de perfeccionar un plato vas a tener que seguir preparándolo día tras día  y sin o es lo que te gusta te va ser de lo más tedioso.

Más allá de todas las cosas buenas y malas que me ha traído esta profesión creo que fue la decisión acertada dedicarme a ella y tuve la suerte de aprender en un lugar donde me enseñaron lo necesario para poder empezar a trabajar y poder adquiriendo conocimiento de nuevas técnicas que posteriormente necesite para mantenerme en el negocio.